Santo Domingo.- El taxista de Uber que fue ultimado por tres jóvenes el pasado 29 de diciembre estaba laborando para sustentar a su familia y sobre todo para cubrir los gastos médicos de su única hija, quien padece de cáncer desde los 4 años.
Como un buen vecino y un padre abnegado describen sus vecinos y esposa al joven taxista Fulgencio Mola Paulino, de 36 años, a quien le fue arrebatada la vida para despojarlo del automóvil que había comprado hace tres meses para laborar en la empresa de servicios de transporte privado, Uber. [Sigue leyendo…]
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