Chequea los comentarios interesantes por el periodista Altagracias Salazar
Altagracia Salazar
El alboroto de ayer en las redes y los medios fue la ratificación del presidente de su compromiso sobre los tres aspectos que justifican la interrupción de un embarazo, eso que los grupos de mujeres llaman las tres causales. Ni los medios ni los religiosos se fijó en lo relativo de la inequidad de la sociedad contra las mujeres y la necesidad de superar esa inequidad que nos hace cobrar menos por el mismo trabajo y aceptar una doble jornada dentro y fuera de la casa como algo normal.
La querida Margarita Cordero llamó la atención de que esos religiosos que gritan para que el país siga siendo uno de los seis países del mundo donde una mujer tiene que mantener un embarazo a riesgo de su propia vida nunca han hablado de que el 14por ciento de las violaciones en RD son cometidas por un padre. Eso se llama incesto y los datos están en el ministerio público.
Esos religiosos y sus acólitos de la partidocracia ultra conservadora rara vez han gritado frente a la corrupción pública que perjudica a los pobres o frente al abuso de algunos cuerpos de seguridad del estado contra la gente de un barrio o de una comunidad. Su militancia religiosa ahora autoidentificada como Gente de Fe es sobre el cuerpo de las mujeres. Que pena que tengan tan poca fe que necesitan de los políticos para que sus ideas religiosas o no prevalezcan. Técnicamente la fe es en un Dios pero los cristianos protestantes y católicos prefieren creer en el poder de un presidente que en el Dios que dicen seguir. Le están demandando al presidente lo que deben pedir a Dios.
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