Las infecciones por coronavirus aumentaron el lunes a más de 13 millones en todo el mundo, según un recuento de Reuters, subiendo un millón en solo cinco días en una pandemia que ha matado a más de medio millón de personas.
El jefe de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo que no volverá a la normalidad en el futuro previsible, con demasiados países en la dirección equivocada.
«El virus sigue siendo el enemigo público número uno», dijo en una conferencia virtual desde la sede de la OMS en Ginebra.
“Si no se siguen los principios básicos, la única forma en que se desarrollará esta pandemia será cada vez peor. Pero no tiene que ser de esta manera.»
El recuento global de Reuters, que se basa en informes gubernamentales, muestra que la enfermedad se está acelerando más rápido en América Latina. Las Américas representan más de la mitad de las infecciones del mundo y la mitad de las muertes.
Partes del mundo, especialmente Estados Unidos con más de 3.3 millones de casos confirmados, todavía están viendo grandes aumentos en una primera ola de infecciones por COVID-19, mientras que otros «aplanan la curva» y facilitan los bloqueos.
Algunos lugares, como la ciudad australiana de Melbourne y Leicester en Inglaterra, están implementando una segunda ronda de cierres. Hong Kong, gobernado por los chinos, aunque con un bajo número de 1,522 casos, es endurecer las medidas de distanciamiento social nuevamente en medio de las crecientes preocupaciones sobre una tercera ola.
Estados Unidos reportó un récord mundial diario de 69,070 nuevas infecciones el 10 de julio. En Brasil, 1,86 millones de personas dieron positivo, incluido el presidente Jair Bolsonaro, y más de 72,000 personas murieron.
El estado de Florida de EE. UU. Informó un aumento récord de más de 15,000 casos nuevos en 24 horas el domingo, más que el total de Corea del Sur desde que la enfermedad se identificó por primera vez a fines del año pasado. Florida registró 12,624 casos nuevos el lunes.
Las infecciones por coronavirus aumentaron en unos 40 estados de EE. UU., Según un análisis de casos de Reuters durante las últimas dos semanas en comparación con las dos semanas anteriores.
Sin embargo, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y los funcionarios de la Casa Blanca han dicho repetidamente que la enfermedad está bajo control y que las escuelas deben reabrir en otoño.
«El presidente y su administración están jugando con la salud de nuestros niños», dijo la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, sobre el programa «Estado de la Unión» de CNN.
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