Rexpuestas
Desde la antigüedad, los quehaceres de la casa se han considerado como una actividad femenina, por lo que desde temprana edad se enseña a la niña a cumplir a cabalidad con este rol. Por otro lado, a los niños no se les hace parte de las tareas domésticas e incluso en muchos hogares se les prohíbe hacerlas, porque se tiene la idea de que esto atenta contra su masculinidad.
Erradamente, muchas personas piensan que si un niño ayuda con los quehaceres de la casa:
• Se convertirá en homosexual.
• Será afeminado.
• No será un hombre macho de verdad.
Sin embargo, científicamente se ha comprobado que porque un niño contribuya con las tareas del hogar no significa que será homosexual ni que deba ponerse en duda su masculinidad.
Contrario a esto, ayudar en el hogar los convierte en adultos responsables, independientes y con alta autoestima. Además, también:
• Contribuye a su madurez.
• Fomenta la unidad familiar.
• Desarrolla su capacidad de colaboración.
• Les ayuda a ser empáticos.
• Fomenta el orden y la higiene en sus vidas.
Cuando a un niño se le enseña a trabajar en equipo desde el hogar y a colaborar con su familia y el lugar donde vive, se le está dotando de herramientas para ser un mejor adulto, una mejor pareja y un mejor padre.
Ser homosexual es mucho más que contribuir con las tareas del hogar, no es algo que se enseña ni se aprende, más bien es una orientación sexual que conlleva sentimientos, emociones y preferencia.
Las tareas domésticas no tienen género, necesitamos olvidarnos de que son actividades femeninas, cuando tanto el hombre como la mujer conviven en una casa.
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