Michael Stepien no pudo presenciar el casamiento de su hija. Lo asesinaron en 2006. Pero su corazón, que estaba en perfecto estado, fue donado y salvó al vida de Arthur Thomas. Diez años después, este hombre entró a la iglesia del brazo de la hija de su donante, en reemplazo de su padre.(Seguir leyendo aqui…)
¿Tú que opinas? Cuéntalo aquí: